lunes, 28 de marzo de 2016

Por la GRANDISIMA culpa...



El avance de las obras del tranvía en Cuenca no alcanza el ritmo deseado y la razón principal es la falta de recursos económicos, porque estos no llegan  a tiempo pese a que es un compromiso del Gobierno Central.

El proyecto nació como oferta de campaña por parte de Paúl Granda quien ganó la Alcaldía de Cuenca para el período 2009-2014. La obra se contrató en la seguridad de contar con el apoyo del régimen de Rafael Correa, quien en ese entonces también buscaba la reelección presidencial, que se comprometió a entregar el 66 por ciento de los cerca de 232 millones de dólares que se calculaba costaría el proyecto; el resto se canalizaría a través de un crédito francés.

De hecho el factor político estuvo presente desde el inicio; sin embargo no hubiese sido malo si todo se cumplía como originalmente se programó. Lo feo empieza porque las transferencias del régimen tardan en llegar y con ello los retrasos en la ejecución de trabajos.

Cuando no se cumple un compromiso, entre los cuencanos solemos decir: "si no puedes para que invitas". La frase viene bien en este rato, pero aún hay tiempo para enmendar las falencias; caso contrario el Gobierno Nacional cargará con la "GRANDISIMA" culpa.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario